No es España un país que cuente con tradición académica en Historia Pública. A diferencia de sociedades más jóvenes, como Estados Unidos, Canadá o Australia, o de sociedades con mayor implicación de la universidad en los debates de sociedad civil y mayores posibilidades de trabajo de sus estudiantes en empleos extracadémicos de carácter histórico, los profesionales españoles se han mantenido mayoritariamente al margen de esos diálogos, enclaustrados en las fronteras de unas instituciones culturales que suelen ensimismarse en congresos, jornadas y seminarios para públicos estrictamente académicos.
El Festival que organizaremos pretende, por el contrario, abrir esas fronteras, no con el ánimo de que los profesionales tutelen una sociedad civil que recuerda, tiene testimonios o construye dispositivos. Su objetivo, más bien, es compartir experiencias, sabiendo además que hay profesionales de la historia que edifican o colaboran en su producción y distribución. Las voces de estas formas de evocar o de construir historia son cada día más potentes y no es posible mantenerse aislados. El pluralismo ha llegado abriendo vías para dialogar en torno al presente y al futuro, pero también, y mucho, sobre el pasado. Y además ha llegado desde contextos más lúdicos por lo que deseamos compartir en el festival música, pintura y diálogos.
El Festival se desarrollará en dos jornadas, con un sesgo muy participativo, dinámico y abierto, articulado sobre dos ejes temáticos:
- Reflexiones, experiencias y memorias en torno a la corresponsabilidad de los historiadores profesionales y los públicos en la construcción y difusión de distintos dispositivos sobre el pasado.
- La pedagogía democrática y su relación con los imaginarios colectivos vinculados a la posibilidad de crear conductas y memorias cívicas.