«Corría octubre de 1988 y en Chile un plebiscito organizado por la dictadura cívico militar (buscando permanecer otros 8 años en el poder) era ganado por una oposición de 17 partidos políticos articulada en torno al “No” a Agusto Pinochet. Fue la respuesta de la sociedad civil a la clausura de la política partidista y las violaciones a los derechos humanos. El resto es conocido: el arcoíris opositor se transformó en una coalición que conquistó y retuvo el poder de 1990 al 2010, dando paso a una década de alternancia que se sobresaltó en otro octubre –de 2019- cuando estalló una rebelión social contra las elites políticas, algunas de las cuales habían participado de la recuperación del régimen civil del corte electoral.» […]